El Rincón de la Memoria, Portada, Recuerdos de Pasión, Sevilla

El dramatismo en los pasos de misterio de la Semana Santa sevillana

El paso de misterio del Santísimo Cristo de la Exaltación de Sevilla, ha sido objeto de estudio de un proyecto de trabajo documental de investigación teórica.

Este trabajo, realizado por Jesús García Zambrano, ha supuesto el final de sus estudios superiores en la Escuela Superior de Arte Dramático de Sevilla.

Jesús García Zambrano, estudiante de la ESAD (Escuela Superior de Arte Dramático) de Sevilla, ha realizado un trabajo documental con motivo del trabajo final de sus estudios. El principal objeto de estudio de este proyecto ha sido el paso de Misterio de la Exaltación de Sevilla.

Bajo el título ‘La teatralidad en el Misterio sevillano de La Exaltación’, esta investigación ahonda en la influencia que tiene el teatro dentro de la Semana Santa sevillana; una fiesta que es, sin duda, una de las más características del Sur, lo que ha generado el estudio de muchos eruditos a lo largo del tiempo: historiadores, antropólogos, sociólogos, etnólogos, teólogos, etc. Este estudiante, en las 71 páginas que componen su proyecto, habla sobre el teatro en el mundo cofrade, la escenificación que tienen sus personajes, el maquillaje, los cabellos, las vestimentas, etc.; y no solo de el misterio de Santa Catalina, sino de otros tantos de la ciudad sevillana.

Son muchos los estudios que relacionan y demuestran el poder y la influencia del teatro en la religión, el Cristianismo en este caso, y viceversa. Su mayor esplendor en este ámbito lo situamos en la Edad Media, periodo que abarca diez siglos y en el que el teatro religioso tiene un papel muy destacable. Es un hecho bien sabido que la mayor parte de la población medieval era en su mayoría analfabeta, quedando el conocimiento y la cultura, casi en su totalidad, para los clérigos y religiosos, puesto que la Iglesia posee en ese momento un poder tan influyente que rige las normas y pautas de vida de toda la sociedad, como las misas y diversos actos religiosos se convierten de esta manera en parte de la vida del pueblo. La Misa aparece, desde el principio como un Misterio de fe y como un drama.

El teatro medieval nace en el seno de la Iglesia, concretamente en el canto litúrgico. El hecho de que la Iglesia tomase el teatro para hacer llegar su mensaje no es casual, ya que las misas se celebraban en latín, lengua desconocida por la mayor parte del pueblo, por lo que el mensaje no terminaba de llegar y el adoctrinamiento se quedaba a medias; para ello recurrieron a la dramatización.

En España la situación difiere un poco en comparación al resto de Europa, puesto que hay que, ya que hay que tener en cuenta que durante gran parte de la Edad Media España fue un territorio islámico, y esta religión no fomentaba las representaciones teatrales, y mucho menos las puestas en escena de textos religiosos cristianos; de ahí que encontremos pocos ejemplos en nuestro país. Hasta nuestros días son pocos los textos que han llegado: tan solo el Auto de los Reyes Magos de la segunda mitad del siglo XII, un tropo del ciclo de la Visitatio Sepulchri hallado en Silos del S.XI, el Auto del nacimiento de Nuestro Señor de Gómez Manrique de mediados del XV, así como algunos textos teatralizados del Nacimiento de Cristo.

La Escenografía, es la diversidad de lenguajes e interpretación simbólica, una simbiosis perfecta que pone sobre los pasos cofrades de Sevilla el teatro en estado puro. Esto ocurre en muchos de los Misterios emblemáticos de la ciudad, como en la Sentencia, la Carretería, San Benito, La Cena, El beso de Judas o Santa Marta; pero es el de La Exaltación el que, quizás por su calidad artística o su antigüedad, mejor sobresale en este ámbito, siendo el objeto de estudio para la tesis de Jesús García.

La fecha del origen de esta hermandad no se sabe con certeza, lo que, si se conoce, es que sobre 1687, la Cofradía se pone en contacto con Luis Antonio de los Arcos, esposo de Luisa Roldán, y con Cristóbal de Guadix, colaboradores del taller de Roldán, para adquirir las imágenes de María y de Cristo en un Misterio que representase el momento en el que se levanta al madero. Pero con el traspiés, que los dos imagineros dejan el trabajo incompleto, teniendo que intervenir de esta forma Luisa Roldán e incluso el propio Pedro Roldán en el trabajo, con el fin de salvaguardar la reputación del taller del maestro sevillano.

Aunque con bastantes dudas sobre las autorías reales de todas las tallas que procesionan el Jueves Santo, sí podemos afirmar que, en su mayoría, aunque con algunas excepciones, todas proceden del círculo y el taller de Pedro Roldán, lo que da a esta agrupación una calidad barroca singular.

En el caso de esta Hermandad, no encontramos referencias en la Biblia del instante representado, pero sí se hace alusión en otros momentos referidos al “levantamiento” de Cristo, como se cita en la Biblia según, Juan 12,32 («Y yo, cuando sea levantado de la tierra atraeré a todos hacia mí.», entre otras citas bíblicas donde se mencionan metáforas sobre como moriría Cristo.

En el proyecto se detalla El espacio y el tiempo, el decorado y la iluminación, los actores, el maquillaje y el peinado, además del vestuario y los accesorios; además de las emociones y sentimientos. Todos estos factores son los que hay que tener en cuenta a la hora de crear un misterio, donde el dinamismo y la acción, llamen al espectador; a no solo serlo, sino también a participar en la escena.

En lo que respecta al espacio gestual, es muy interesante ver la relación entre personajes respecto a la proxémica y el reparto y equilibrio del escenario. De este modo: En proscenio izquierdo tenemos al primer sayón que tira de la cuerda y en el otro extremo, proscenio derecho, el segundo sayón que también tira. Jesús clavado en la cruz queda en el centro del escenario, y a sus pies, a la derecha, un sayón que encaja el madero en la tierra, y metiendo el hombro a la ayuda de este otro sayón más agarra la cruz quedando físicamente por detrás ligeramente hacia la izquierda de Jesús. Resulta interesante ver el espacio cerrado que construyen estos tres personajes, que con una distancia muy próxima entre sí generan dinamismo a la acción del erguimiento de Cristo. A la izquierda de ellos quedan los dos ladrones, pegado a la cruz Dimas, y tras él Gestas; tenemos que mencionar que la distancia física en este espacio es casi inexistente, pues los ladrones aparecen uno tras el otro y pegados a la cruz, con los sayones a los pies del crucificado, y los romanos atrás del mismo. Finalmente, en segundo término, quedan los dos caballos y los dos romanos, el de la izquierda, de pie, al lado del animal, y el de la derecha sobre el caballo; lo cual compensa y equilibra el escenario, pues si bien el peso está más repartido hacia la izquierda, el romano sobre el caballo sobresale a una determinada altura equilibrando de esta forma la composición escénica.

Para leer todo el Proyecto Jesús García ha facilitado su trabajo a la Hermandad de la Exaltación, mediante un archivo PDF, pudiéndose leer en el siguiente enlace al sitio web; https://www.laexaltacion.org/la-teatralidad-en-el-misterio-sevillano-de-la-exaltacion/