Antonio Santiago Cabello, nieto del maestro Manuel Santiago, acompañará al Señor del Perdón junto a Luis Miguel Carrión Huertas “Curro”, el próximo Sábado en el Viacrucis de las Hermandades, tras 25 años de historia, como lo haría en su día su abuelo.
Y es que hay imágenes con las que es imposible no recordar el pasado. La que acompaña este artículo es una de ellas; una fotografía de la primera salida procesional protagonizada por la Hermandad del Perdón en la que aparece el recordado Manolo Santiago junto a Luis Miguel Carrión, “Curro”, capataz de la cofradía de San Roque. La amistad que les unía, hizo que aquel día histórico de 1994, el capataz sevillano comandara el paso del Señor del Perdón. Apenas un mes después de su bendición, el Señor del Perdón era subido a un paso cedido por la Hermandad de la Virgen del Rayo, para salir por primera vez para realizar un Vía Crucis por las calles de su barrio.
Al martillo, el capataz de Sevilla, el discípulo de Salvador Dorado “El Penitente”. Manolo Santiago llegaba a la ciudad de San Rafael de la mano de “Curro”, con la ya consabida experiencia que los años, y los pasos que comandaba, le habían otorgado. Hermandades como la Resurrección, San Gonzalo, la Paz, la Macarena, Los Gitanos, el Silencio, los Negritos, entre un largo etcétera, habían depositado la confianza de su bien más preciado, sus titulares, a las órdenes de esa voz que tantos costaleros sevillanos obedecieron. Un elemento simbólico más que se añadió a aquella inolvidable jornada para convertirla en única, memorable e irrepetible, si bien la presencia de Santiago por las calles de Córdoba volvió a reproducirse junto al Señor de la Judería y al mando del paso del Sepulcro, siempre junto a Curro.
Al año siguiente, la corporación presentó la documentación pertinente a la Agrupación de Hermandades y Cofradías y nombró a su primer Hermano Mayor: Juan Manuel López Alcaide. También en 1995 se volvió a realizar el Vía Crucis con el Señor del Perdón, ocasión para la que esta vez se contó con el paso de Nuestro Padre Jesús de la Pasión.
Tras haber dado meticulosamente los pasos oportunos, llegaba al fin uno de los momentos sin duda más deseados para la hermandad: el de la salida de Nuestro Padre Jesús del Perdón ya como una más de las cofradías agrupadas. Esta primera y ansiada estación de penitencia se producía en la jornada del Miércoles Santo de 1996, ocupando el segundo lugar en el orden de llegada de las hermandades. Iba el Señor en soledad sobre un paso de pequeñas proporciones, igual que en su Vía Crucis, dirigido ya por Luis Miguel Carrión Huertas “Curro” .
Aquella primera salida, en la que el Señor ante Anás caminó por primera vez por su ciudad, y que se sigue recordando por todos los protagonistas de aquel día, marcó para siempre la historia de la Semana Santa cordobesa. Una imagen que estará muy presente dentro de unos días cuando el Rey de la Judería presida el Vía Crucis de las Hermandades con motivo del veinticinco aniversario de su bendición, una cita que volverá a dejar imágenes memorables para el recuerdo, pero esa será otra historia…