La Hermandad de la Soledad continúa haciendo historia en virtud del traslado de su sede canónica desde la iglesia de Santiago a la parroquia de Santa María de Guadalupe, la Iglesia anexa al colegio de los Franciscanos. Traslado que fue aprobado en el Cabildo General extraordinario celebrado el pasado mes de enero y que supone un antes y un después en el devenir histórico de la Hermandad.
Una llegada que ya comienza a dejarse sentir por las calles del barrio de Sagunto y de toda la zona de Levante como evidencia las escenas que la propia corporación franciscana ha difundido a través de su cuenta oficial en una conocida red social y que demuestra que la presencia de la bellísima dolorosa de Luis Álvarez Duarte comienza a dejarse sentir por los rincones de su nuevo barrio.
Una sensación de que el proceso de traslado está a punto de culminar que se deja notar también en la fachada del nuevo hogar de la Corporación del Viernes Santo cuya nueva puerta está a punto de ser culminada con la decoración y el revestimiento.
Conviene recordar que la hermandad determinó, en un acto de responsabilidad, que el traslado a su nueva sede no se desarrolle del modo que inicialmente estaba previsto, de forma pública, debido a las consecuencias de la pandemia que estamos padeciendo», «tras escuchar las recomendaciones de las autoridades y expertos así como las propuestas planteadas por los hermanos que conforman la Comisión de traslado se ha decidido que el traslado de sede canónica no pueda llevarse a cabo en las formas que en un principio se tenían planteadas».
La corporación añadía en su comunicado que «los hermanos que conforman las distintas comisiones, a las cuales animamos a incorporarse una vez más a todos aquellos que quieran aportar sus ideas y experiencia, están trabajando para próximamente exponer todos los detalles y los actos a realizar tanto en la despedida de la Parroquia de Santiago Apóstol como en la llegada a la Parroquia de Santa María de Guadalupe».
