Las personas que estén divorciadas no recibirán la autorización para ostentar los principales cargos en las hermandades de Málaga capital.
Así lo explica el Diario Sur en una información firmada por Antonio M. Romero, que viene a reflejar la decisión de Jesús Catalá, Obispo de Málaga, tras el proceso electoral en la Hermandad del Rescate, que ha vuelto a ser anulado.
Catalá expresa en el decreto que “la Iglesia no puede aceptar como miembro de una candidatura a personas divorciadas que han vuelto a contraer matrimonio civil con otra persona”, sentando así precedente para todas las demás hermandades de la Diócesis.
Según explica el medio de comunicación malagueño, hasta ahora la limitación había quedado restringida al hermano mayor, pero en virtud al citado decreto, esta limitación ahora se ampliaría a otros puestos de cierta relevancia en el organigrama de una junta de gobierno.