Las semanas que conforman el primer tramos del curso cofrade suele ser una época propicia para que las distintas definan aquellos detalles que contribuyen a determinar su puesta en escena cuando se convierten en cofradías bajo el cielo de la primavera. Detalles de hacen referencia, entre otras cuestiones de relevancia, a las formaciones musicales escogidas para servir de contrapunto musical al caminar de sus sagrados titulares por nuestras calles y plazas.
Es el caso de la hermandad de la Oración en el Huerto de la localidad gaditana del Puerto de Santa María que acaba de anunciar que será la Agrupación Musical de Nuestra Señora de la Encarnación, conocida popularmente como San Benito, la que acompañará musicalmente al paso de misterio de la cofradía el próximo Miércoles Santo. De este modo, la cofradía portuense se garantiza seguir contando con una formación musical de primer nivel toda vez que la banda de la Calzada sustituye a la Agrupación Musical Virgen de los Reyes que ha decidido descansar este día del ciclo.
Nuestro Señor Jesucristo orando en el Huerto, obra de Francisco Pinto Berraquero, bendecido en 1961, procesiona acompañado por el Ángel confortador y las imágenes de los Evangelistas Santiago, Pedro y Juan que duermen bajo un olivo natural, en paso de madera dorada de estilo neobarroco realizado por Lutgardo Pinto (1961) y dorado por Manuel Daza Marín (1964) en pan de oro fino. Cuenta con medallones donde se reproducen las catorce estaciones del Vía crucis en su canastilla. En la esquinas figuran las imágenes de los cuatro Evangelistas realizadas por Juan Luis Doello (1996).
Va alumbrado por cuatro candelabros en las esquinas de siete guardabrisas cada uno, llevando a sus pies un ángel realizado por Francisco Pinto Berraquero (1962) y dos candelabros a los laterales de tres guardabrisas cada uno realizados por Antonio Díaz Fernández (1987). Los guardabrisas están rematados con tacilla y coronilla realizada en metal cincelado y dorado en oro fino por los talleres de la viuda de Villarreal (1981). La última restauración a la que fue objeto este paso se realizó en los Talleres de Dorados San Francisco de Sanlúcar de Barrameda (2007). Desde hace algunos años, el paso luce un calvario realizado en diferentes material que imitan el campo natural del huerto de Getsemaní. Calza cuarenta hermanos costaleros.