Juan Luis Berrocal, capataz general del Resucitado

El comienzo del curso cofrade en la ciudad de Córdoba está siendo más ajetreado de lo habitual, en lo que se refiere al mundo del costal. Si hace tan solo unas semanas el capataz del paso de palio de la Virgen del Buen Fin, Juan Luis Berrocal, anunciaba su decisión de no seguir al frente de la cuadrilla de la dolorosa de la Hermandad del Descendimiento, hace tan solo unas horas otro capataz ha desvelado a su cuadrilla una decisión idéntica.

Se trata del capataz del paso de misterio de la cofradía que cada año cierra la Semana Santa en la ciudad de San Rafael, la Hermandad del Resucitado, Antonio Sánchez Domingo, conocido como “Tato”, que ha presentado su dimisión por razones de índole. Una decisión que ha sido contrastada por la Junta de Gobierno de la Hermandad del Resucitado con el nombramiento del nuevo responsable del paso de misterio que, a la sazón, lo será de toda la cofradía toda vez que han sido nombrado capataz general de la misma, precisamente Juan Luis Berrocal Campos, que a imagen y semejanza de lo que hizo su padre, Juan Berrocal Peligros, ejercerá como máximo responsable de ambos pasos de la Corporación santamarinera.

Juan Luis Berrocal, heredero indiscutible de uno de los capataces más importantes de la Semana Santa contemporánea, en la ciudad de San Rafael, es depositario de la amplia sabiduría aprendida, de manera particularmente acusada al frente del paso de palio de la Virgen de la Alegría, cuya cuadrilla lleva dirigiendo desde hace años con un gusto impecable, así como en la salida procesional de la Virgen del Rayo del mes de septiembre y del paso de palio del Buen Fin, y es poseedor de un magnífico presente y un futuro brillante.