Portada, Sevilla

La crónica | El Cerro entró en Sevilla a sones de tamboril

La corporación completó de forma triunfal su romería

La Hermandad del Rocío del Cerro del Águila regresó a la capital hispalense en la tarde-noche de ayer jueves, junto al resto de filiales sevillanas tras peregrinar a las plantas de la Reina de las Marismas.

La corporación entraba a la ciudad por el Puente de las Delicias a última hora de la tarde, tras sestear en el Acar de Tablada y soportando el penetrante calor que registraban ayer los termómetros en la provincia.

Los sones de la flauta y el tamboril ponían la nota musical a un regreso histórico tras dos años sin poder caminar por las arenas; y los romeros rodeaban la carreta del Simpecado, delicadamente adornada con flores silvestres de distintos colores.

A medida que avanzaba la noche y se acercaban al barrio por la Avenida de Hytasa, los vecinos cerreños se iban sumando a la comitiva para acompañar al Simpecado en los últimos kilómetros de este hermoso sueño de la romería de Pentecostés.

La carreta pisaba ya el barrio, que se volcaba con su corporación rociera en lugares tan característicos como la calle Afán de Ribera o Nuestra Señora de los Dolores, entonándose vivas a la Virgen antes de entrar en la Parroquia y poner fin a esta gloriosa semana de oración y fervor por la Blanca Paloma.