Córdoba

La Hermandad de los Dolores celebra la tradicional presentación de los niños a la Virgen

La historia de las distintas corporaciones que configuran el Universo Cofrade, se compone de una mezcolanza de factores que constituyen la memoria colectiva de los miembros que las integran. Pequeños pedacitos que contribuyen a construir la base esencial sobre la que se asienta la herencia imperecedera que se fortalece y se transmite de generación en generación.

Una de las hermandades que en la ciudad de Córdoba, siempre se ha caracterizado por la conservación de sus recuerdos más íntimos, materializados en arraigadas tradiciones, que lo son, más allá de la profundidad histórica que lleve aparejada su realización, es la hermandad de los Dolores, que vuelve a dar una muestra de esta convicción con el anuncio de la celebración de la popular Candelaria que, en la corporación de San Jacinto, goza de una hermosa simbología. Un acto que se celebra año tras año al amparo de la Señora de Córdoba, que se erige en uno de los más hermosos que se vive en el corazón de uno de los núcleos devocionales fundamentales de la ciudad de San Rafael.

Así, la tradición seguirá renovándose como cada año.  Nuestra Señora de los Dolores Coronada recibirá a fieles y devotos el 2 de febrero a partir de las 17:00 horas en la festividad de la presentación de Jesús en el templo, conocida popularmente como Las Candelarias. la Señora de Córdoba recibirá las plegarias de sus feligreses. Todas las personas que asistan podrán recibir la Bendición bajo el manto de la Santísima Virgen de los Dolores, desde la hora del inicio hasta su finalización a las 19:00 horas.

Conviene recordar que desde hace varios años, la corporación del Viernes Santo procede a la apertura del retablo de la dolorosa que gubiara Juan Prieto en 1719 para que niños y mayores pasen por debajo del bendito manto de la Virgen de los Dolores, mientras hermanos de la cofradía se encargan de velar la imagen mariana para que todo aquel que desee la protección de María se inunde de fe y esperanza bajo su amplio velo negro bordado en oro.