La Cofradía de la Divina Pastora de la ciudad de Jaén, vivió en la mañana del pasado domingo 13 de marzo, una jornada para el recuerdo, cargada de ofrendas musicales a su amantísima titular, en un teatro Darymelia lleno de pastores.
El concierto, que estaba previsto para el pasado 2020, por fin pudo celebrarse, siendo la Banda de Música de la Esperanza de la ciudad de Córdoba, la encargada de interpretar un selecto repertorio, donde se intercalaron marchas dedicas a la Divina Pastora y marchas procesionales de siempre.
En el transcurso del mismo, fue estrenada la marcha “Madre de los Pastores” compuesta por Pablo Martínez Recio, un joven músico, el cual es toda una promesa en el campo de las marchas procesionales. La misma, se compuso en el año 2020, con motivo del 425 aniversario fundacional de la Cofradía de los Pastores de Jaén.
Cabe destacar, la enorme ovación que dicha marcha recibió tras su estreno, formando estas notas ya parte del patrimonio musical pastoreño.
En declaraciones para este medio, Martínez Recio, nos describía con detalle esta marcha: “‘Madre de los Pastores’ fue el primer encargo que se presentó en mi carrera artística y por ello me siento muy agradecido tanto a la Hermandad de la Divina Pastora de las Almas de Jaén como al mecenas, mi amigo David López Garvi. Surge en el año 2019 con motivo de la celebración del 425 aniversario fundacional. Ambos estuvimos de acuerdo en la concepción de la marcha como gloriosa, libre como la naturaleza y el campo, alejada de una descripción estricta y narrativa de la música pero tampoco identificada como música ‘pura’, por lo que enseguida me asocié con tres estilos estéticos que componen la marcha en una estructura ‘tripartita’.
El primero de los temas refleja una estética de marcha clásica pero con un lenguaje armónico asociado a la actualidad de las marchas, con el planteamiento melódico muy cerrado, lo que permite entender la estructura fraseológica desde una primera escucha. Se podría identificar con Sergei Rachmaninov, que es quizás un buen ejemplo como compositor que realizaba esta práctica. En el eje central de la obra, se encuentra el comienzo de la Sexta Sinfonía (más conocida como Pastoral) de Beethoven, de quien se estaba celebrando el 250 aniversario de su nacimiento durante el año de la composición de esta pieza. A este tema se le añade un contrapunto a modo de fuerte de bajos, como hacía Eduard Grieg añadiendo voces a las Sonatas Mozartianas. En el trío, tema final y conclusivo, la textura musical adquiere un carácter más etéreo, con acordes de mucho color y poca definición melódica. Tras el punto culminante del tema y de la marcha, reaparece la introducción a modo de Coda cerrando el aspecto clásico-estructural y redondeándolo. Se terminó de escribir el 19 de marzo de 2020. Prevista para estreno el 9 de mayo del mismo año, concierto frustrado por razones evidentes”.