En el marco de la última celebración de los “sábados de mayo” en honor a la Santísima Virgen del Alcázar, donde instituciones, asociaciones, movimientos, Cofradías y particulares realizan ofrenda floral a la Patrona de Baeza en su camarín de la Parroquia de Santa María del Alcázar y San Andrés Apóstol, la Muy Ilustre, Real e Imperial Cofradía del Milagroso Pendón de San Isidoro, conocido históricamente como el invicto Pendón de Baeza, realizó la imposición de la medalla de su corporación a la Reina de Baeza.
La Santa Misa, en la que estuvieron presentes diferentes autoridades políticas y religiosas, estuvo presidida por el Rvdo. Sr. D. Domingo Antonio Pérez Fernández, Párroco de San Andrés y Capellán de la Archicofradía.
Comenzó la celebración, con la procesión de entrada, en la que los hermanos de la Cofradía del Pendón de Baeza se revistieron con su túnica, acompañados así mismo por las banderas de la Archicofradía baezana. Tras el rezo del credo, el regidor en Baeza de la Imperial Cofradía D. Fernando Viedma Puche, dio lectura del acta de concesión de la medalla de la Cofradía por parte de la corporación leonesa a la Virgen del Alcázar.
Segundos más tarde, dicha medalla, le sería impuesta a la Santísima Virgen del Alcázar en su camarín, entre aplausos, emociones y los sones del himno nacional desde el órgano barroco.
Desde ahora, la Patrona de Baeza, lucirá y portará, la medalla de esta histórica institución, que hunde sus raíces en la ciudad y que a pesar de los siglos, no olvidó ni su relación, ni el amor filial de los baezanos a Santa María del Alcázar, amor, que también profesan estos hermanos desde la distancia, quedando como testigo de dicho amor, esta medalla.