Cuando uno tiene la oportunidad de visitar otras tierras de nuestro hermoso país, se nos presenta esas ocasiones, que se cuentan con las manos, donde puedes admirar la categoría cofrade existente fuera de nuestras fronteras andaluzas.
En esta ocasión, tuve la suerte de visitar el precioso pueblo de Torralba de Calatrava, provincia de Ciudad Real.
La suerte estaba de mi lado y mi viaje hizo coincidir con las fiestas del pueblo; donde, su patrón y protector, el Cristo del Consuelo”, recibía los máximos honores de sus conciudadanos.
El Cristo del Consuelo es una obra del insigne imaginero andaluz afincado en Sevilla y oriundo de Alhaurín el Grande (Málaga); Antonio Castillo Lastrucci, realizada esta obra en 1939.
Con respecto a la imagen, no podemos negar que se trata de una obra de Lastrucci; ya que los rasgos faciales son idénticos a algunas de nuestras imágenes en Andalucía como El cristo de la Buena Muerte (de la Hermandad de la Hiniesta), Jesús en su Sagrada Presentación al Pueblo (San Benito) o el Santísimo Cristo de la Vera-Cruz (Alhaurín el Grande, Málaga).
En torno al “paso”, podemos destacar que lleva palio, como en algunos tronos de comarcas andaluzas como Antequera (Málaga). También podemos decir que no se trata ni de un paso ni de un trono; ya que no es llevado ni por costaleros, ni hombres de trono, ni horquilleros, ni cargadores.
Los “torralbeños” lo llaman carrozas; ya que el “paso” tiene un volante para dirigirlo y es empujado por los hermanos. Sí es cierto que, algunos torralbeños están luchando porque la imagen pueda ser llevada por personas.
Con respecto a las fiestas en honor a su sagrado titular, se sucedieron ofrendas florales, misas, y todo aquello que, con las circunstancias pandémicas del momento podían hacerse (ya que, evidentemente, la procesión estaba suspendida).
Cabe reseñar desde el punto de vista “musical”, que, en la madrugada del día grande de su titular, entorno a las 4:00 de la madrugada, una serie de hermanos, también conocidos como “Tambores de cristo”, que hasta bien entrada la mañana, recorren el pueblo a paso ordinario anunciando el día grande de su cristo.
En pocas palabras, recomiendo que visitéis esta maravilla de pueblo y no dudéis en visitar al señor del Consuelo en su ermita; una categoría espectacular dentro de esos rincones cofrades escondidos de nuestra geografía.
