El arzobispo Saiz Meneses impuso la presea a la Santísima Virgen en un pontifical impecable
El sueño se hizo realizada. Por fin se puede gritar con toda la alegría y el fervor que la Virgen de Escardiel de la sevillana localidad de Castilblanco de los Arroyos, ya está coronada canónicamente.
El arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz Meneses, impuso al atardecer las Benditas preseas del Niño y de la Señora, siendo la primera coronación del prelado desde que ejerce el ministerio en la capital andaluza.
El acto se iniciaba a las 17:30 horas, cuando la Virgen de Escardiel era trasladada hasta la explanada de los antiguos colegios de la Avenida Antonio Machado, donde estaba preparado el altar para la Santa Misa.
El ambiente de los hermanos y devotos era de felicidad, emoción y gozo por vivir una jornada tan especial junto a la Imagen Mariana, teniendo en cuenta además los atrasos que produjo la pandemia en esta cita histórica, prevista inicialmente para 2020.
Cientos de mantillas se paseaban por las calles para honrar a la Titular, aportando clasicismo y prestancia al Solemne Culto.
Junto a ellos, miles de personas llenaban no sólo la zona acotada, sino los alrededores de la Avenida para presenciar el mágico instante. Y cuando llegó el momento, todos estallaron en aplausos (incluido el propio arzobispo) cuando la espléndida Imagen lucía la corona en su paso de tumbilla.
Tras ello, se iniciaría una extraordinaria procesión por las calles de Castilblanco donde no faltaron los llantos de emoción, los vivas, las petaladas y las plegarias a Santa María de Escardiel hasta su entrada en la Parroquia del Divino Salvador pasadas las 2 de la madrugada.
Finalizaban con ello casi cinco años de anhelo ante un acontecimiento que se marcará para siempre en la memoria de hermanos y devotos.