Ha llegado el mes de julio y Córdoba ha amanecido con Nuestra Señora del Carmen de San Cayetano Coronada entronizada en el altar de cultos.
Como ya se informó, estrena un dosel realizado por Antonio Díaz Arnido. La Obra recuerda los grandes doseles de trampantojo barroco. Resaltan la pintura en óleo sobre tabla y el pan de oro que simulan la arquitectura y se integra en su entorno.
Contemplamos dos ángeles efebos sobre nubes que portan cascos con plumas. Llama la atención que uno de ellos deja vislumbrar el paisaje de la ciudad de Córdoba en el ocaso.
Corona el dosel el escudo de los Carmelitas Descalzos con una filacteria con el lema de la orden “Zelo Zelatus Sum Pro Domino Deo Exercituum”.
