Portada, Sevilla

Cyrta culmina la restauración del manto de la Virgen los Dolores de Carmona que perteneció a la Esperanza de Triana

La empresa Cyrta de restauración y conservación de piezas textiles antiguas ha concluido la intervención del manto de la Virgen de los Dolores de la Hermandad del Silencio de la localidad sevillana de Carmona. Este prodigio del bordado que perteneció a la Esperanza de Triana anteriormente, fue trasladado a las instalaciones de Cyrta para su remozado en el mes de febrero de 2021.

La empresa conservadora ha emitido un vídeo sobre está intervención que ha consistido en un aspirado, un microaspirado, una limpieza físico-química, eliminación de zurcidos, consolidación, encapsulado de zonas dañadas, encapsulado y reintegración volumétrica y reconstrucción del encaje tal y como ha explicado el taller. Estos trabajos han permitido conocer las modificaciones que, a lo largo de la historia, se han realizado sobre la pieza.

El equipo multidisciplinar que ha participado en la intervención está encabezado por el restaurador responsable: Pablo José Portillo Pérez y ha contado con el estudio histórico de Ángel González Gautier, el estudio de gráficos de Helena Sevine y los estudios científicos de Laura Osete Cortina.

La restauración de Cyrta ha arrojado luz sobre muchos aspectos de la pieza, recobrándose el esplendor natural de este impresionante manto bordado.

Una joya decimonónica

El manto bordado de su Dolorosa es obra de Emilia Salvador Ibarra, procedente del año 1891. Esta pieza, como antes se indicó, formó parte del ajuar de la Esperanza de Triana, según la identificación con uno de los pocos testimonios fotográficos que perduran de la Esperanza en el siglo XIX, donde aparece acompañada de la Magdalena y San Juan en un altar de cultos en el templo de San Jacinto, entre los años 1892 y 1898. Pese la datación mencionada (1891), la Virgen trianera no lo estrenó en la salida procesional de aquél año como atestiguan fotografías de la época que la muestran ataviada con un manto de terciopelo oscuro liso.

El antiguo manto decimonónico de la Esperanza de Triana fue vendido a la Hermandad carmonense del Silencio en el año 1909, conservándolo desde entonces como pieza importantísima en el patrimonio de su titular mariana.