Música
La mitad de las dolorosas coronadas canónicamente irán acompañadas por bandas propias. Es el caso de los Dolores, de la Expiración, Zamarrilla, Soledad de Mena, Esperanza y Trinidad. María Auxiliadora irá acompañada musicalmente por la banda de música de la Paz, Dolores del Puente irá con la Unión Musical Maestro Eloy García, y la Vera Cruz de Almogía hará lo propio con Santa María de la Victoria. Solo dos bandas vendrán de fuera: el Carmen de Salteras, que irá tras la Virgen del Carmen, y las Nieves de Olivares, que acompañará a la Virgen del Rocío.
Tronos
Todas las imágenes irán en sus respectivos tronos, a excepción de la Virgen del Carmen, del Perchel, que lo hará bajo el palio de María Santísima Reina de los Cielos, titular de la Agrupación de Cofradías de Málaga. En cuanto a la patrona, será colocada sobre la carroza del Corpus una vez que complete su recorrido.
La corona de la patrona
Atención a la presea que luce Santa María de la Victoria, realizada tomando como modelo la de plata de la reina Isabel la Católica. Casi dos mil gramos de oro de 18 quilates, un total de 1.523 brillantes, 1.427 perlas, 113 esmeraldas, 54 zafiros, 112 rubíes, 45 jacintos, 17 granates, 7 turmalainas, 40 amatistas, 88 turquesas, 25 topacios y 8 ópalos. Además, se añaden 41 piezas varias.
La segunda imagen coronada canónicamente en Andalucía
Este privilegio lo tiene la imagen de María Auxiliadora, que fue coronada el 30 de junio de 1907 en el colegio salesiano, por D. Juan Muñoz Herrera, por aquel entonces obispo de Málaga. La primera imagen mariana, como es sabido, fue la Virgen de los Reyes, de Sevilla.
La primera imagen de penitencia coronada
En la capital malagueña fue coronada canónicamente María Santísima de los Dolores. Se convirtió así en la primera dolorosa de la ciudad en recibir esta distinción, hecho que aconteció el 4 de octubre de 1986 en el primer templo de la diócesis. Fue coronada por el arzobispo de Granada, D. José Méndez Asensio.
Archidona
La ciudad malagueña estará presente en la procesión magna porque la Virgen del Carmen lucirá durante este acto el manto procesional de Nuestra Señora de la Victoria, de Archidona.
Doble celebración
María Santísima de la Trinidad no solamente recordará este 2018 por participar en la procesión magna de esta tarde sino que además, la hermandad se encuentra inmersa en el desarrollo de los actos y cultos que se vienen desarrollando este año con motivo del cincuentenario de la bendición de la dolorosa. Este hecho acaeció el 27 de febrero de 1968.
Policromía
Atención a la policromía de Nuestra Señora de los Dolores, del Puente. Atribuida al escultor Pedro Asensio de la Cerda por el catedrático Juan Antonio Sánchez López, quien afirma que pudo realizarse entre los años 1740 y 1746, la dolorosa mantiene no solamente las manos unidas como era común en la centuria dieciochesca sino que conserva la policromía original. Una tez pálida que se ha convertido en un distintivo característico de la dolorosa, y que es todo un acierto mantener en una época donde no son pocas las imágenes que la han perdido por culpa de restauraciones poco acertadas.
La despedida
Según el horario oficial, la Virgen de la Esperanza llegará al puente que lleva su nombre alrededor de las 2:30 horas. Tras ella, la dolorosa de la hermandad de la Expiración. Quienes se han encargado de la organización de ambas procesiones aseguran que se vivirá un encuentro histórico antes de que cada imagen mariana continúe ya por caminos separados: la primera de ellas hacia su basílica y, la segunda, hacia su casa hermandad.
Orden de los cortejos
Todos los cortejos llevarán el mismo orden. En primer lugar, dos ciriales flanquearán la cruz alzada, seguida de cincuenta parejas de hermanos que portarán cirios. Entre ellos, el estandarte de la corporación o el sine labe concepta. Después, el estandarte mariano, el guion corporativo, la presidencia compuesta por seis cargos de la junta de gobierno, acólitos, la imagen mariana en el trono y el acompañamiento musical.