La Cofradía egabrense de Jesús Caída y María Santísima del Buen Fin ha confirmado la renovación del contrato con la Sociedad Filarmónica María Inmaculada de Linares para que continúe acompañando el caminar de su Imagen Mariana los próximos cuatro años. La Corporación estudiantil vuelve a apostar por una de las grandes formaciones musicales de palio de la actualidad la cual recaló en la ciudad cordobesa hace escasamente dos años fraguados en el cariño y el respeto.
La Virgen del Buen Fin es obra del taller de Santa Rufina de Madrid, firmada por José María Oriol en 1991 siendo restaurada en el año 1995 por el egabrense Santiago Molina. Procesiona sobre un paso de palio con respiraderos realizados en los talleres lucentinos de Hermanos Gradit en el año 2002 y con capillas frontal y lateral en las que aparecen representadas escenas iconográficas de la pasión.