Córdoba, Portada

El Calvario baraja sacar al Señor en procesión extraordinaria por el 300 aniversario de su bendición

La Junta de Gobierno de la Hermandad del Calvario ha convocado a sus hermanos a la celebración de sendos cabildos de índole extraordinaria que se celebrarán en la Casa de Hermandad, sita en la C/ Prolongación Escañuela, 1 local, el próximo viernes, 22 de septiembre, a las 21:15 horas en primera convocatoria y a las 21:30 horas en segunda, y en el que se tratará la aprobación de los actos extraordinarios concebidos con motivo de la conmemoración del CCC Aniversario de la Bendición de Nuestro Padre Jesús del Calvario en 2024. A continuación, tendrá lugar el segundo cabildo para aprobar el cambio de fecha del Quinario de Nuestro Padre Jesús del Calvario para el año 2024.

Cabe recordar que el pasado mes de julio una representación de la junta de gobierno, encabezada por su consiliario Don Rafael Rabasco, acudió al Palacio Obispal en audiencia con el Excmo. y Rvdmo. Sr. Don Demetrio Fernández, de cara a perfilar los actos que conmemorarán el tricentenario de la hechura y bendición de la Sagrada Imagen de Nuestro Padre Jesús del Calvario. El Obispo animó a la corporación recorrer este camino en comunión y fraternidad, y a seguir propagando la devoción al Señor. Según apuntas fuentes cercanas a la cofradía, entre las propuestas que baraja la junta de gobierno de la hermandad de San Lorenzo podría encontrarse la celebración de una salida extraordinaria a la Santa Iglesia Catedral, que se podría producir la próxima Cuaresma, que sirva de punto culminante para la conmemoración de esta efeméride.

Una intención que ya fue barajada con anterioridad en el seno de la hermandad bajo el mandato de Francisco Javier Murillo, quien tenía la intención de celebrar una salida extraordinaria de ambos titulares de la cofradía, Nuestro Padre Jesús del Calvario y Nuestra Señora del Mayor Dolor con motivo de la celebración del tercer centenario de la Hermandad, Una opción que terminó siendo desestimada, optándose por una celebración de un perfil más bajo por las vicisitudes internas que han asolado a la corporación en los últimos años, y que ahora parecen haberse difuminado, por lo que esta podría ser una de las propuestas estrella que se presentarán a cabildo en unos días.

El Nazareno de San Lorenzo

Fechada en 1723 y bendecida a comienzos de 1724, la Sagrada Imagen de Nuestro Padre Jesús del Calvario fue realizada por el trinitario descalzo Fray Juan de la Concepción. El tiempo de noviciado del religioso en Granada explica la impronta estética de la efigie, tan relacionada con los gustos barrocos granadinos. Como buena parte de las imágenes de la época, fue tallada en madera de pino de Flandes. Las características plásticas de la talla se corresponden con los aires dulcificadores que inundan los años del rococó. Formas menudas, que buscan la delectación de quien las contempla, dan vida a esta imagen que inspira, sobre todo, ternura, debilidad y sentido de la compasión. De ese modo logra por el camino de la belleza el fin primordial de atraer la devoción.

Como es habitual en las imágenes de vestir, el cuido formal de la talla es mayor en las zonas destinadas a la contemplación. Las anatomizadas extremidades inferiores imprimen a la imagen un movimiento de avance poco acusado, adelantando el pie izquierdo. Los brazos se articulan en los codos, permitiendo el revestimiento de la efigie y la colocación de las manos en la Cruz. Éstas abrazan suavemente la mitad inferior del palo menor, más baja la diestra, siguiendo el ritmo inclinado del torso. Viejos testimonios fotográficos muestran al Señor sujetando con la mano izquierda la cabecera de la Cruz.

El suave modelado excluye los virtuosismos anatómicos, dentro del decoro que corresponde a una imagen devocional. Nuestro Padre Jesús del Calvario posee una bella cabeza, de la que emana buena parte del poder de atracción que durante casi tres siglos ha movido el fervor de los cordobeses. Muy hermoso el rostro, con frente despejada, finas cejas en ese, grandes ojos cristalinos de mirada baja y boca pequeña y entreabierta, enmarcada por los menudos mechones longitudinales de bigote y barba; ésta, bífida, deja al descubierto la zona superior de la barbilla.

La larga melena se ajusta al cráneo y cae blandamente hacia la espalda. Los regueros de sangre y el hematoma del pómulo izquierdo dan el apetecido toque de dramatismo sin estridencias. Acentúan los valores escultóricos las cálidas carnaciones. Esta Imagen ha sido restaurada en tres ocasiones: en 1949 por Amadeo Ruiz Olmos, en 1984 por Miguel Arjona Navarro en el que se restituyó las partes dañadas de la policromía y reforzando las piernas con nervios de hierro y en 2001 por Enrique Ortega Ortega.