Querido lector de Cruce de Gallardetes:
En algunas ocasiones, los cofrades somos un poco complicados entre nosotros mismos, en nuestros debates internos, en los cuales siempre, debe de destacar el interés común. Es legítimo, faltaría más, que cada uno tenga su punto de vista, pero para un entendimiento, debemos de hacerlo poniéndonos en lugar de los demás.
¿A qué viene esta reflexión? En mi opinión, cuando existen diferentes puntos de vista, no creo que sea para atentar contra lo que tenemos o que esto sea movido por algún tipo de interés personal, todo lo contrario, yo creo que todos queremos lo mejor para lo demás, no para nosotros mismos. Por ello, también debemos de tener los pies en la tierra y pensar que cuando se propone una idea, es por una necesidad, no por un capricho personal de unos cuantos.
Todos queremos la mayor grandiosidad para nuestra Semana Santa, para nuestras glorias, para nuestras Cofradías y Hermandades en definitiva, pero también se debe de entender de que todos no contamos con el mismo capital humano, material y demás, por ello, no entendamos una propuesta o idea desde el ataque personal, sino desde la empatía, de saber, que quizás, sea porque todas las Cofradías no pueden llegar al mismo nivel, no de destruir lo existente.