Bajo un calor sofocante y entre un mar de fieles, la Reina de la Capilla volvió a peregrinar por su bendita tierra un año más. A hombros de sus horquilleros, la Patrona de Jaén se dispuso a enfilar el camino hacia la Catedral recuperando el antiguo itinerario por las calles del barrio de San Ildefonso, Sede Canónica de la Hermandad.
Bajo una petalada y a los sones del Himno Nacional interpretado por la Sociedad Filarmónica de Jaén, la Virgen de la Capilla reviró hacia Muñoz Garnica a través de las calles de su barrio engalanado con banderas de España y mantos bordados donde se podía leer “Capilla Coronada”. A la llegada a la Plaza de Santa María, multitud de personas se mantenían expectantes al paso de la Señora mientras Ella buscaba la calle Bernabé Soriano que le llevaría hasta la Plaza de la Constitución alrededor de las 20:00.
A la llegada a la calle Ancha, más de una treintena de caballistas y mujeres vestidas de sevillana protagonizaron uno de los momentos más bellos de la procesión, pero el punto álgido del desfile tuvo su máxima expresión en la Ofrenda Floral a la Virgen, a las 00:00, esta vez en la portada de la Basílica de San Ildefonso en las estructuras instaladas para la ocasión.
Este año el estreno más importante fue la restauración de la corona, otros estrenos como el acompañamiento musical en la cabecera del desfile, este año corrió a cargo de la Agrupación Musical de la Estrella de Jaén. También dicho desfile estuvo salpicado por la tristeza de la reciente muerte de le Hermano Mayor de la Cofradía, Enrique Caro , cuya vara de mando fue portada por la Reina de la Capilla.