Hasta cinco pasos han procesionando en el amplio cortejo
Triana ha celebrado en la mañana de este domingo su espléndida procesión del Corpus Christi tras dos años en blanco por el coronavirus.
Multitud de personas ha acompañado a cada una de sus Imágenes que salen el Corpus, el cual cuenta con la peculiaridad de ser el más antiguo que desfila por la calles, celebrándose desde 1506.
Una vez más ha sorprendido a propios y ajenos el amplio y rico número de imágenes que salen con el Corpus en sus respectivos pasos: El Niño Jesús, portado por los niños de la feligresía ataviados de costaleros; Santa Justa y Rufina, mártires muy vinculadas a Triana, contando además con el Patronazgo de la Cerámica; San Juan Evangelista de la Hermandad de la Esperanza de Triana, Imagen que salía a la calle por vez primera tras su restauración, finalizada pocos días antes; y la hermosa talla de la Inmaculada.
Bellas imágenes del Corpus de Triana a su paso por San Jacinto, el Altozano y Pureza. Fotos: Alejandro Sigüenza.
Completando esta magistral serie escultórica, remataba el cortejo la gran custodia de plata, obra vinculada al platero Andrés Osorio en 1712, sufriendo posteriormente algunas reparaciones, tal y como indica la Archidiócesis de Sevilla.
Dicha custodia, sigue detallando la iglesia hispalense, se compone de tres cuerpos. El primero es una base separada, grabada con atributos del sacramento, y sobre la que se asienta el primer cuerpo. Éste se compone de ocho columnas labradas, y entre cada dos iba colocado un evangelista, que actualmente están sobre la base. El segundo cuerpo se compone de otras ocho columnas, con 16 efigies colocadas alrededor de una barandilla; también hay ocho ángeles de cuerpo entero, con un ramo de tres rosas en medio de cada dos de ellos. El último cuerpo se compone de ocho columnas más pequeñas, y entre ellas cuatro efigies, y en el centro un libro con los siete sellos, sobre el que está el Cordero con la bandera y la cruz, y cuatro serafines con palmas. En el remate superior hay una figura de la FE, que lleva en una mano un cáliz y en la otra la cruz.
La belleza de la custodia con la Sagrada Forma que representa el Cuerpo y la Sangre de Jesús Sacramentado, refulgía con el sol que ha acompañado la jornada festiva; y era además engalanada aún más si cabe con los sones de las Bandas que han acompañado la comitiva: San Juan Evangelista, en el inicio; Las Tres Caídas de Triana, tras la Inmaculada; y la Banda de Música María Santísima de la Victoria (Las Cigarreras) junto al Señor.
Cabe mencionar, tal y como se pudo apreciar perfectamente durante el itinerario, la belleza y diversidad del exorno floral de los pasos, pasando desde el colorismo de las andas del Niño y Santa Justa y Rufina; a el regusto clásico del blanco conjugado con la vegetación verde en la Inmaculada, San Juan y la custodia.
A mediodía regresaba a la Real Parroquia de Santa Ana la procesión tras recorrer calles tan señeras como Pelayo y Correa, San Jacinto o Pureza.
Finalizaba con ello una exquisita salida que será recordada por muchos trianeros que anhelaba volver a sentir la presenciar de Dios en las calles durante la Fiesta del Corpus.