La salida extraordinaria protagonizada por la Virgen de la Paz y Esperanza tras ser coronada canónicamente en la calle Mezquita Catedral de Córdoba continúa teniendo consecuencias más allá de la investigación que se está produciendo acerca del uso de material pirotécnico sin la debida autorización por parte del Ayuntamiento de la capital.
Tras el anuncio de la Asociación de vecinos de Santa Marina ahora son los vecinos del centro quienes se han dirigido al Ayuntamiento para solicitar la reducción de procesiones fuera del ámbito de la Semana Santa a través de un escrito dirigido a la alcaldía en la que se solicita que no rebasen las 23 horas y se evite su proliferación a lo largo del año así como las molestias de ocupación masiva del espacio público, ruidos y otras consecuencias.
El escrito exige al Ayuntamiento que se informe de manera continuada de las autorizaciones de este y cualquier tipo de actividades en la vía pública en un apartado visible de la web municipal al menos con tres días de antelación a su celebración.
En ese sentido la Asociación de vecinos solicita información sobre lo ocurrido con el lanzamiento de material pirotécnico no autorizado durante la procesión de la Virgen de la Paz y Esperanza dentro de lo que establezca el marco legal de privacidad ya que es un asunto que ha ejemplificado todos los problemas que se buscan evitar con la reducción de procesiones y la limitación horaria.
finalmente los vecinos del centro muestran su protesta porque la procesión provocó varios incidentes así como grandes molestias “para las personas que viven o visitan una parte importante del casco histórico de la ciudad”, toda vez que la procesión tuvo un horario muy amplio ocupando gran parte de la noche y la madrugada provocando cortes de tráfico y ruidos durante ese tiempo en distintos lugares del casco histórico. Quejas que evidencian que no todo parece haber salido tan perfecto como algunos pretenden aparentar.